miércoles, 19 de septiembre de 2012

Complejo de Amélie

No puedo dejar de pensar en la película Amélie y en su afán por querer ayudar a los demás. El mundo sería mucho mejor si todos aplicaramos esa filosofía. Sin embargo, no es fácil. A veces, para que los demás no se rompan en pedacitos, tienes que aparentar ser dura como una pieda aunque por dentro sientas que con la mínima palabra que escuches o, si das un "pensamiento en falso", te vas a deshacer.

miércoles, 27 de junio de 2012

Entre los Beatles y Queen

Aviso antes de empezar a escribir: NO TENGO NI IDEA DE MÚSICA. Mis padres siempre han tenido puesta la radio en casa todo el día y yo he heredado esa costumbre pero eso no quiere decir que tenga buen criterio. Me gustan algunos grupos y canciones porque me transmiten buen rollo, la melodía es pegadiza o mil motivos más pero nunca por una lógica razonada gracias a conocimientos musicales.

Los últimos meses he escuchado en la radio la canción We are young y cada día que la oigo me gusta más. Es ese tipo de canción a la que me refería, cuando la oigo me da buenas vibraciones. Así que me he puesto a investigar y he descubierto que aparece en el disco Some nights de un grupo que se llama Fun. Además, es una colaboración con Janelle Monáe, una cantante norteamericana de la que no había oído hablar jamás. Este es el vídeo de la canción en cuestión que tampoco tiene desperdicio:


Después de buscar esta información escuché el disco completo. Los que sabéis de música me podréis corregir pero a mi me ha recordado por momentos a The Beatles y, especialmente,  a Queen. De hecho, hubiera jurado que el grupo es inglés y, sin embargo, es estadounidense.

Para los que tengáis curiosidad, en esta noticia de The New York Times hablan de ellos, su evolución y algunas opiniones de críticos.




domingo, 10 de junio de 2012

El país del fúbol

Qué orgullos estamos de nuestro fútbol. Tenemos dos de los mejores equipos del mundo: el Barça y el Madrid. Y la mejor selección, la campeona del mundo, la nuestra.  Cada vez que juega se para el país, nos emocionamos, nos volcamos con ella. En definitiva, nos hacen olvidar todo lo malo.

Los gobernantes son muy conscientes y, sin que nos demos cuenta, lo utilizan contra nosotros. Ayer se produjo un claro ejemplo de esto. Anuncian el rescate al sistema financiero un sábado 9 de junio. ¿Casualidad? Desde luego que no.
Llevamos muchos meses en esta maldita crisis y si hubieran querido podrían haber llevado a cabo este rescate en cualquier otro momento, cualquier día de la semana. Sin embargo, han decidido anunciarlo un sábado y el día antes de que España juegue su primer partido de la Eurocopa. De este modo, hemos estado asustados unas horas pero esta tarde cuando nuestro equipo salga al campo -y en epecial si gana- ya no pensaremos en los bancos. El miedo se nos pasará aunque solo sea mientras la selección siga en la competición.

Que el ministro haya comparecido en sábado tampoco es casual ya que es un día en el que en los medios de comunicación hay muchos menos trabajadores que durante el resto de la semana.  Además, los ciudadanos estamos en nuestro tiempo de ocio y prestamos menos atención a lo que pasa en el mundo.

Otro tema, relacionado con el fútbol y la política que daría para otra entrada del blog es que Rajoy se vaya a ver el partido de hoy a Polonia. Creo que debería cambiar de asesores porque que acudada a un encuentro que no tiene especial trascendencia y gastándose el dinero de los españoles da muy mala imagen. Ver al presidente disfrutar de placeres a los que la mayor parte de los ciudadanos no podemos acceder, cuando nos dice que tenemos que hacer un esfuerzo y apretarnos el cinturón, no es plato de buen gusto y solo crea crispación.

Esperemos que esta tarde gane España y que, mientras no nos enteramos porque los ensordecedores gritos de celebración nos lo impiden, el rescate funcione como el Gobierno nos dice que lo hará.

lunes, 21 de mayo de 2012

Mamá Tunza

Hacer zapping y encontrarte con algo en la tele que valga la pena no tiene precio, y eso me pasó ayer. Por la tarde, en TVE repitieron -para hacer tiempo mientras no empezaba el partido de Nadal- un reportaje de Vicente Romero para Informe Semanal titulado "El milagro de Mamá Tunza" que yo no había podido ver cuando lo estrenaron. (Lo podéis ver todavía aquí, es más, deberíais verlo ).
Cuenta la historia de Mamá Tunza, una mujer pobre, muy pobre, de Nairobi que desde que se encontró a un bebé abonadonado en la basura no ha parado de recoger niños de la calle. Por su casa han pasado más de 350 pequeños a los que ha dado un hogar y una educación solo con algunas ayudas de la gente. Y a los que, sobre todo, les ha proporcionado algo que no se paga con dinero: mucho cariño.

 
Me ha sorprendido la generosidad de Mamá Tunza. Apenas tiene para comer ella pero ha abierto su casa a todos los niños que la han necesitado. Su fuerza, su tesón y su valor para sacar adelante ese "proyecto" solidario también es admirable. Sin embargo, lo que me ha parecido más curioso es el contraste con los países más desarrollados donde nos pensamos mucho si tenemos hijos por miedo a no poder pagarles todos los caprichos, mientras que en ciertas zonas subdesarrolladas tener un plato de comida y cariño es más que suficiente para salir adelante.
Nos hemos creado demasiadas necesidades materiales sin las que ya resulta imposible vivir y que, cuando no tenemos dinero para acceder a ellas, nos vuelven cada vez más infelices. Quizás, como dice la canción de Macaco,  "volver al origen no es retroceder".

lunes, 6 de febrero de 2012

Y me aburre...

Después de muchos meses sin escribir, parece que sigo sin inspiración. No sé si por mi situación personal o porque el momento en el que vivimos no me aporta nada más que pensamientos negativos.

En las noticias se repite de forma incesante los mismos temas. Estos asuntos se resumen en política, política y más política. Cada vez que pongo la televisión me da la sensación de que estoy viendo el mismo informativo que el día anterior. Y ya me aburre.

Cuando abro alguna web para leer el periódico más de lo mismo. También me aburre.

Creo que he encontrado una parte del problema: Twitter. Veo las actualizaciones de las "personas" que sigo - la mayoría son periódicos y agencias de noticias- y me agobio con toda la información que aparece. Con 140 caracteres me cuentan el titular de algo que ha pasado y me conformo. Es más, me conformo tanto que cuando tengo que leer en la pantalla algo más largo de una frase y media ya me aburro y paso a otra cosa.

Me estoy acostumbrando a hacer muchas cosas a la vez pero a prestar muy poca atención a cada una de ellas. Así al final acaba por aburrirme todo.

miércoles, 26 de octubre de 2011

Starbuck: una película impecable

Aunque la Seminci empezó el fin de semana para mi hoy ha sido la primera jornada. En un principio había pensado ver una película del ciclo "Spanish Cinema" pero finalmente, tras la recomendación de una amiga -muy acertada por cierto-, me decanté por una de la Sección Oficial: Starbuck

Se trata de una película preciosa y divertida, con un buen guión, una realización impecable y, sobre todo, un planteamiento muy simple pero a la vez tremendamente original. En ella Ken Scott, el director y guionista, narra la historia de David, un hombre que donó esperma a los veinte años  y que a los cuarenta -y cuando su novia está embarazada- se encuentra con que tiene 533 hijos fruto de sus donaciones y que 142 de ellos han emprendido acciones legales para saber quién es su padre.

Las risas están garantizadas y se van mezclando con momentos en los que el protagonista, interpretado por Patrick Huart, muestra su lado más entrañable, humano y desconocido.

No sé si será porque es canadiense pero me ha recordado a Juno en muchos aspectos, entre ellos la música.

A pesar de que puede parecer a simple vista un poco insulsa es una gran película. No creo que sea la favorita del jurado -están hechos de otra pasta y con unos gustos un poco especiales- pero a juzgar por las opiniones de los espectadores que puede escuchar a la salida del cine, podría ser la ganadora del premio del público. 

viernes, 21 de octubre de 2011

Ninguna persona merece morir asesinada

 Lo siento pero la muerte de Gadafi no me hace sentir bien. Al igual que la de Bin Laden o Sadam. No creo que el fin (acabar con una dictadura) justifique los medios (matar al dictador). Tampoco me parece razonable que estemos en contra de la pena de muerte para unas personas y para otras no.
A Sadam lo condenaron a muerte, por lo menos tuvo un juicio -aunque fuera de legitimidad dudosa- y después en todo el mundo pudimos ver como colgaba del cuello.  A Bin Laden lo frieron a tiros en la que parece una acción que no estaba destinada a atraparlo vivo y, a saber cómo acabó  porque las imágenes del cadáver no han salido a luz. Y Gadafi, en teoría, ha muerto "luchando" sin embargo, si nos fijamos en las imágenes es muy probable que no haya fallecido por un tiro durante el fervor de la batalla sino por un disparo destinado a rematarlo.

No podemos defender nuevas democracias ni luchar porque se cumplan los derechos humanos si después celebramos la muerte de ciertas personas. Es cierto que Gadafi ha sido un hombre terriblemente cruel y ha cometido mil atrocidades por las que debería haber pagado pero eso no justifica que no haya tenido un juicio y que haya saldado su deuda con la vida.